De impronta vanguardista y escrita bajo un modelo de escenario cinematográfico, el lector deberá armar el cuerpo narrativo de esta novela, donde abundan las referencias musicales, los soliloquios y los destellos líricos.
«Empecé este libro queriendo hacer reír a mi madre pero luego me di cuenta que esta novela no iba a gustarle, pensé entonces en dedicársela a mis hijos, pero son menores a la fecha, pensé luego en Masanobu Fukuoka y José Martí pero solo por hacerles publicidad (además, ya están muertos), pensé en Jimmy Page pero este es un libro de fiesta castellana. Entonces, dedico este libro a un amigo y buen lector que, de no haber viajado, sería el padrino de mi menor hijo. El vitalísimo, Rafo Díaz»
Grupo Editorial Caja Negra
Lima